Ésta zona parece tener algo a favor de las galerías de arte en lugares poco accesibles, en el medio de espesos bosques y cerca de los lagos meas cristalinos que he visto en mucho tiempo. Y además alquilan barcas en verano. Y tienen un café delicioso. Y llegar hasta aquí en bicicleta (aparte de bastante jodido) es algo que no tiene precio. Sobre todo con el aire fresco y los colores de primeros de otoño. Se llama Taide-Nuuttila, por cierto...
2 comentarios:
Mmmm... aunque soy una patosa en bicicleta (y sin bicicleta), esto inaugura oficialmente mi libreta de "Cosas que hacer en el norte cuando monte la escapada al norte" :)
Tienen página web, ¿la has visto?, es interesante... Yo tengo que volver porque la galería sólo abre en verano, y aunque los alrededores son alucinantes (ya irás viendo), quiero ver que hay dentro.
Lo de la bici es como para hacerlo, el camino es relativamente fácil y vale la pena (también lo he hecho en coche y no es lo mismo...) Y la habilidad sobre dos ruedas se aprende rápido...
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